Amalio Solano/"Los asesinos miembros de la OTAN"

Por: Amalio (Mayito) Solano
amasol-5@hotmail.com

En el mundo no habrá paz mientras los Estados Unidos se metan en los asuntos internos de los demás países. Ya vimos el desastre que hicieron en Irak, donde destruyeron con sus bombas a ese país, asesinaron a mujeres, hombres, a inocentes niñas, niños y dejaron a miles de personas heridas y mutiladas. Por eso es que no habrá paz porque ellos viven de la guerra y disfrutan haciendo sufrir a la humanidad.

¿Cómo pueden los gringos hablar de derechos humanos si son ellos los que matan a sus propios ciudadanos llevándolos a la cámara de gas, o colocándole una inyección letal? ¿Cómo pueden hablar de democracia y querer imponerla a los demás países si la peor democracia la tienen ellos? Son unos criminales cobardes que no se enfrentan sólo a un país.

No es mentira la planificación de invadir cinco naciones y acabar con sus gobiernos. Vimos el caso de Irak. Con Irán no han podido, allí está su presidente Mahmoud Ahmadinejad esperando que se atreva el gobierno de los Estados Unidos dar la orden de atacarlos. A Gadafi le tendieron una trampa; lo fueron llevando a sus países, le colocaron la alfombra roja, hicieron negocios con él y hasta lo convencieron de que no necesitaba tener esos armamentos para defenderse porque allí estaban ellos, para defenderlo.

Cuando vieron que él no representaba un peligro para ellos, le hicieron la guerra. Pero Estados Unidos sólo le era imposible acabar con Gadafi, por eso le tiró la pelota a la OTAN y en cayapa le cayeron. Veinte mil bombas lanzadas sin importarles las consecuencias. Como siempre.

Los asesinos miembros de la OTAN le robaron las reservas internacionales, se repartieron el dinero como buenos ladrones para levantar su economía; comenzaron a lanzarles bombas, le prohibieron volar sus aviones para evitar que atacaran a los libios rebeldes mientras ellos con sus aviones no tripulados atacaban edificios, escuelas, hospitales y palacios de gobierno.

Todo esto se incrementó cuando dieron la orden de capturar vivo o muerto al líder de la revolución Libia. Y así pasaron cinco meses de intenso bombardeo sin poderlo capturar mientras asesinaban a un pueblo. Los rebeldes libios parecían unos animales sedientos de sangre matando a sus propios hermanos. Cadáveres quedaban a sus pasos por las calles atados de manos y con tiros en sus cuerpos. Al meterse entre las casas buscando a los seguidores de Gadafi, los agarraban y los mataban; o si alguien era sospechoso entonces los agarraban y se los entregaban a sus jefes porque ellos “sabían lo que iban hacer”.

El premio Nobel de la paz, Barak Obama, es un premio Nobel asesino junto a Silvio Berlusconi (Italia), Nicolas Sarkozy (Francia), Zapatero y el rey Juan Carlos (España) y los gobernantes de Dinamarca y Canadá. Todos los que en el ayer fueron sus “amigos”, un día decidieron acabar con él.

Ellos creen que con haber asesinado al hombre que los ayudó y le financió la campaña al presidente de Francia, se resolvió todo. No. Ahora es cuando va haber más derramamiento de sangre. El hijo del asesinado líder de la revolución Libia, ha dicho que vengaría la muerte de su padre.

Sólo a los presidentes del imperio se les ocurrió matar, matar y matar para hacer ver que son los líderes del mundo. Ahora a Obama junto a los miembros de la OTAN, se le ocurrió para renovar ese “liderazgo” matar a Gadafi, a su familia y a un pueblo que creía en su líder. Estados Unidos Se han engrandecido como nación haciéndole la guerra a los vecinos y andando por el mundo con sus portaviones amenazando, pero a estos asesinos se le para el trote respondiéndole a sus amenazas, como ya lo ha hecho el comandante Chávez y el presidente de Irán.

Asesinaron a Gadafi después que lo capturaron. Le dieron un tiro en la pierna y otro en la espalda y sangrando por la cabeza lo subieron en una camioneta. Sus captores parecían una jauría de perros ante su presa. Luego le dieron un tiro en la cabeza. Después que lo asesinaron, ocultaron su cadáver y quienes lo hicieron juraron no divulgar donde lo enterraron. Pero esas fieras humana olvidan que el remordimiento algún día les hará confesar la verdad.

Podríamos vernos en ese espejo, pero que se atrevan; que intenten meterse en nuestro país. Aquí se van a encontrar con un pueblo (me refiero a un pueblo chavista, porque la oposición no se va a atrever a defender a un hombre que quieran o no es su presidente) y su Fuerza Armada que sí defiende a su comandante. Esos asesinos miembros de la OTAN “morderan el polvo de la derrota” como lo ha dicho Chávez.