martes, 9 de octubre de 2012

Opinión: ¡Hay un camino… aún!

Por: Yonny Galindo
yonnydg@gmail.com

El país habló, aunque no como hubiéramos querido que se expresara, pero, ni modo, esa fue su palabra. Hoy comparto estas reflexiones para destacar algunos elementos que pudieran servirnos de aprendizaje para asimilar lo que ocurrió el domingo.

Poner en el primer plano las dos Venezuela que se confrontaban no resultó favorable para nosotros, para el gobierno sí, en tanto que un poco más de la mitad de los electores les pareció muy riesgoso salir de este sistema político y entrar en otro en donde no tenía certeza del papel que le tocaría jugar, ni de los beneficios que le reportaría.

Tuvo miedo de cambiarlo. Para él este sistema político aún no está agotado, esto sólo hay que mejorarlo.

54% de los venezolanos siente que lo que hay es que mejorar lo existente, pero no cambiarlo. Antes no existían, por eso optaron por esta forma de existir aún siendo apocada.

Me explico simulando sus palabras, “ahora como poco, pero como, carne y pollo no será la más de las veces, pero las como, no me alcanza el sueldo, pero lo tengo, hago colas para comprar, pero compro”.  

Esa parte importante del país nos envió también este otro mensaje: “anda y camina conmigo, pero dentro de esta revolución, lucha conmigo, pero dentro de este socialismo; si hay algo mejor, no me lo digas, enséñamelo, házmelo ver dentro de mi propia realidad. Esta es mi ética y desde ella me relaciono con mis semejantes”.

La otra parte del país que sí nos compró el mensaje de cambio y de la Venezuela del progreso hay que deslindarla de todo radicalismo y conducirla a que se acepte compartiendo y asumiendo responsabilidades, trabajando de igual a igual con quienes defienden a su comandante, por supuesto manteniendo su propio perfil y asumiendo su disidencia con el gobierno.

Ahora voy a la otra parte de mi análisis, y la extraigo de un titular de la agencia de noticias Reuter: “La oposición perdió la presidencia, pero ganó un líder”.

Pues bien, Henrique Capriles salió de la voluntad popular, por lo que debe seguir asumiendo su condición de conductor del autobús y continuar guiándonos por el camino que empezó a trazar.

Capriles no puede dejarlo, debe seguir cual guardafaro iluminándolo, señalándolo, para nosotros continuar construyéndolo y los que votaron contrario hacerles sentir que ese camino no es un salto al vacío.  

La lucha continúa. El llanto que dure las 48 horas debidas, pero hay que salir con pasos de elefante a marcar y señalar territorios de lucha y de trabajo, porque aún hay un camino.

Este humilde escribidor seguirá en las diarias batallas en las arenas de la política y en las de la academia por una mejor Venezuela, con una educación que emancipe a sus jóvenes, los haga autónomos y con competencias para que puedan alcanzar la movilidad social.

Esas batallas las libraré desde las aulas, desde la academia, por lo que fortaleceré aún más mi formación académica como investigador educativo, para hacer oír mi palabra a mis estudiantes y a todos los que pueda darles amor y vida.  

Por los momentos, me incorporaré a la campaña de Hernán Núñez para ganar la confianza de los sucrenses y hacerlo gobernador. Eso espera Sucre y Venezuela de nosotros,  que continuemos, que Henrique Capriles se siga mostrando como conductor del autobús del progreso, que nos sigas diciendo que hay un camino, para seguir andando con él y decirle con versos de León Felipe:  

/Caballero derrotado/ /Hazme un sitio en tu montura/ /que yo también voy cargado/ /de amargura/ /y no puedo batallar./ /Ponme a la grupa contigo,/ /caballero del honor,/ /ponme a la grupa contigo/ /y llévame a ser contigo pastor.../ /Por la manchega llanura/ / se vuelve a ver la figura/ /de Don Quijote pasar/

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios aparecerán luego de ser revisados