El pasado domingo 28 de octubre, día habitual de esparcimiento y paz en Carúpano, se convirtió en un día de júbilo inolvidable para los sucrenses. Pues 42 hombres y mujeres de esta tierra, dedicados de por vida a la cultura y tradiciones, fueron acreditados con el título universitario de Maestros Honorarios por la Universidad Nacional Experimental de las Artes (Unearte), en un acto académico enmarcado en las instalaciones de la Fundación del Poder Popular “Don Luis Mariano Rivera”.
En presencia del Ministro del Poder Popular para la Cultura, Pedro Calzadilla, el Viceministro de fomento para la economía cultural, Humberto González, la rectora de la Universidad Nacional Experimental de las Artes, funcionarios del ministerio de la cultura, del ministerio de educación, el alcalde del Municipio Bermudez Julio Rodriguez, y del municipio Arismendi Jose MAcondo Guerra, la Directora General del Gabinete estadal Sucre Myriam Sesto, el ex ministro de educación Luis Acuña y un público que, no solo colmó butacas y pasillos del auditorio, sino que también se desbordó en emociones y aplausos para los honrados; los ahora Maestros Honorarios desfilaron uno por uno para recibir el documento que los acredita y, a su vez, para demostrar a través de su sapiencia y expresión autóctona, su agradecimiento y satisfacción por este reconocimiento.
El himno nacional fue interpretado por Jorge Manuel Cabello con la Marimba montesina, instrumento monocorde originario de las etnias coacas. El inolvidable Gualberto Ibarreto fue el encargado de abrir el acto con su interpretación de la “Guacara”, insigne tema escrito por Don Luis Mariano Rivera. Lourdes Campos artesana y sanadora Kariña saludó en su lengua originaria y dedico este reconocimiento a sus ancestros, asi como reconoció y agradeció al gran Ali Primera haber llenado a su corazón de resistencia. Saturnino Briceño Smith, nos brindó con amor y orgullo la interpretación del himno nacional en Patúa, lengua de origen franco-africano, que se habla sólo en el extremo oriental de la Península de Paria y el Callao, estado Bolivar. Y si cada uno puso su color cultural entre anécdotas, decimas, aguinaldos, prosas y lenguajes parianos e indígenas.
Muchas fueron las expresiones de admiración, gratitud, anécdotas, historias y coincidencias las que se manifestaron en el auditorio del antiguo Ateneo de Carupano, quienes regocijados en el afianzamiento de su trabajo cultural, exhiben con orgullo su certificado. Más que un reconocimiento al trabajo, es un reconocimiento a la vida, logrado solo bajo el proceso de inclusión, visibilización y dignificación de la Revolución Bolivariana. (T/F EP)
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