Opinión: Muestra bien definida

Por: JOSE ISIDRO CORDERO

¿Habrá otros países en el mundo equivalentes a Venezuela en cuanto a la disposición del Estado a actuar con contumacia en contra de la sociedad civil, a la cual, por mandato constitucional, debe proteger, orientar y cuidar? Pueda que existan países con gobiernos y estructuras de poder de tendencia hegemónica, totalitaria, donde impere algún desequilibrio producto de un desbalance de fuerzas. Situación que puede estimular hacia la aplicación de ciertos mecanismos de control que incluyan elementos represivos.

Países como el nuestro, donde todo el andamiaje institucional del Estado se comporte con absoluto apego a la defensa de un núcleo de poder inmerso en un pensamiento único, que se expresa en abierto uso y abuso en la utilización de los medios de que dispone el Gobierno para arraigar indefinidamente un modelo ideológico, jamás lo encontraremos en otra parte del orbe.

Aparte de la permanente exclusión que las instituciones del Estado aplican a todo aquél que muestre, una posición contraria a la doctrina administrativa de quienes detentan el poder político gubernamental, en Venezuela, los eventos electorales sirven de barómetro para calibrar la desmesurada conducta, que alcanza altas cotas de inmoralidad, en la utilización de los bienes de la República para favorecer a los factores políticos en ejercicio de gobierno. Una demostración palpable del apabullamiento a que se exponen quienes luchan por un cambio en la conducción de los destinos de la Nación, son las declaraciones que ha emitido la señora Luisa Estella Morales, presidenta del TSJ, a propósito de la petición que ha hecho el comando “Simón Bolívar”, órgano de dirección de la campaña electoral del candidato Henrique Capriles, de que se cuenten el 100% de las boletas de las urnas electorales, para confirmar los resultados presentados por el CNE.

Según la señora Morales, en exposición hecha sin que nadie le haya pedido opinión y en postura parcializada al extremo con los lineamientos del Gobierno, por tanto en declaraciones de tinte netamente político, en Venezuela la petición de conteo manual de los votos emitidos por los ciudadanos no procede porque las elecciones son automatizadas. Como ya se hizo, habría que preguntarle a la señora Morales, ¿si en Venezuela el conteo manual de los votos no procede, por qué el CNE establece en el Reglamento Electoral que, en caso de desperfectos de cualquier máquina de votación, que esté en funcionamiento durante el acto del sufragio, si pasados 190 minutos no ha sido corregida la falla, la directiva de la Mesa Electoral, debe ordenar la votación y conteo manual de los votos? Por otra parte, si no existe el conteo manual, ¿por qué se establece la auditoría –que se hace manualmente- del 54% de las mesas de votación? Además, ¿por qué se considera delito electoral el que alguien se niegue a introducir la boleta en la urna electoral? Es posible que la presidente del TSJ desconozca la legislación y normativa electoral, pero lo que sí queda nítido es que sus declaraciones son una muestra bien definida de la arbitrariedad del Estado contra la sociedad civil, más allá de que de la forzada admisión de conteo de votos que aprobó el CNE.

BRISAS SUAVES
EN LA JERGA jurídica hay una expresión muy elocuente para referirse a hechos que no necesitan interrogatorios: “A confesión de parte, relevo de pruebas”. Esa expresión bien pudiéramos aplicarla en lo que tal vez fue lo más importante de lo dicho por Nicolás Maduro en el acto de su juramentación como Presidente de la República al manifestar que creará una comisión especial para que se encargue del problema de la corrupción. Si va a crear una comisión para ese propósito es porque admite que el Gobierno está carcomido, invadido por el morbo de la corrupción. Entonces nos preguntamos, ¿en qué período de tiempo se incubó la corrupción en el Gobierno? Tanto Maduro como muchos de los que actualmente se adosan a él llevan 14 años en el Gobierno, de manera que deben saber dónde reside la conducta delictiva de apoderarse de los recursos públicos. Estimo que la tarea de esa comisión, si llegara a crearse, será bastante fácil, bastaría con pegarle la mano a unos cuantos de los que ejercen altos cargos en la administración pública…

LO PESCARON EN Margarita, y precisamente en tierra seca. Mi amigo Luis Gerardo Muñoz Fabbiani fue capturado y llevado ante el altar por la simpática señorita María Cecilia Esteves, con quien contrajo nupcias en acto oficiado por el sacerdote Irineo Valbuena, en la iglesia del Santo Cristo del Buen Viaje de Pampatar. Me complace felicitar a los contrayentes, y en el deseo de que sea para siempre me permito un consejo con validez para ambos. “Comunicación permanente, tolerancia y comprensión”. Allí reside la magia…

A PROPOSITO DE todo el tinglado formado por la petición de conteo del 100% de los votos emitidos por los ciudadanos en las elecciones presidenciales recién pasadas, y de la actitud cuartelaría de Diosdado Cabello en sus funciones de presidente de la Asamblea Nacional, podríamos hacer nuestras aquellas palabras que, frente a la vandálica gesta de la Guardia Civil española al querer imponerse por la fuerza a los dictámenes institucionales de España, dijo el tribuno Unamuno: “Podréis vencernos porque tenéis las armas, pero no podréis convencernos porque no tenéis la razón”…

DEFINITIVAMENTE Y DEMANERA contundente, Venezuela, después de estas elecciones presidenciales, toma otro rumbo; en dirección a dejar atrás las querencia de más de 50 años en la manera de hacer política y en la forma de hacerse respeta en la aplicación de los principio de los Derechos Humanos. Comenzamos a ser distintos, avalados por la crítica a cualquier intento de vulnerar la dignidad de la persona humana…
USTED VOLVERA a leerme.