viernes, 17 de abril de 2015

Opinión: Cuentos de corruptolandia

Por: Econ. Antonio José Rivera Chávez
profetanoskagamus@yahoo.com

En Venezuela una de las consecuencias derivadas de la presencia maligna del excremento del Diablo como factor determinante de los Ingresos Nacionales llegados con poco esfuerzo y sujeto por otra parte a la bonanza del mundo capitalista y sus empresas para una venta diaria de petróleo bien remunerada es la “buropatia” como enfermedad administrativa generalizada en los políticos donde la Ley Básica del Contincoleo es seguida al pie de la letra por el numero reducido de quienes tienen poder decisorio para disponer de los Fondos Públicos de un plumazo.

El oportunismo dado los cambios en razón de la política es además necesaria para la migración con garrocha ante las frágiles talanqueras “ideológicas” las cuales son muy vulnerables ante las necesidades monetarias de esta “buropatia” acostumbrada ha no producir si no escándalos en caso de ser descubiertos en el oficio de la marramuncia oficial. Una condición esencial de los personajes de la “buropatia” es su afición ante todo por las divisas ($) o en segunda instancia Bolívares de forma y manera que su pasión es monetaria lo demás es adorno para camuflar la trampajaula.

En este transcurrir conocí en su momento a unos personajes a los cuales les observe habilidades maravillosas para ejercer con Maestría Académica en la Universidad de la vida el oficio de burochorocratas de tal forma que podían ser asesores de un Comando Subversivo en lo económico, redactores de Programas de gobierno de un Social Cristiano y participar en simultaneo de una rebatiña ministerial con Social Demócratas sin que produjera inconveniente alguno en el ejercicio de sus funciones . Un mismísimo Maestro de la Guisologia una vez lo encontré compungido por que su enlace adeco se disgusto mucho con el pues según había viajado a San Felipe (Yaracuy) cuna del líder copeyano para en hábil maniobra de contacto “person to person” pegar afiches en esta ciudad y ser reconocido como activista copeyano lo cual era mas falso que peso de buhonero pero así era la buropatia de este señor que se arrimaba esperando el boche clava’o en cada elección. En verdad esta avispa’o busca puestos logro ciertos progresos económicos y la suerte le llego completa cuando el día del Golpe bajo influencia alcohólica y en compañía de un “comandante” gritaban desde el balcon de un apartamento del Este caraqueño y denunciados por la vecindad fueron llevados a la DISIP. Manda’o hecho. A la larga el amigo de todos se convirtió en preso por golpista y el final fue cortar y coser para andar de puesto en puesto pero al agraciado conquistador se le fue el Yo Yo y en uno de esos privilegiados cargos “boto” a un hermano político de un Ministro no sin antes hacer alharaca de su Poder y confianza de los burócratas del entorno. El enloquecido burócrata había perdido su propia brújula y se creyó un Che Guevara de pacotilla lo cual le valió varios años de presidio y ahora esta mas raya’o que disco de freno. Cuenta así mismo la leyenda que al burócrata le cobraban otros picaros burochorocratas abogados hasta setenta mil por visita a la celda bajo promesa de sacarlo de la celda con rapidez. En ese cuento del Gallo Pelón lo tuvieron por dos años por lo cual el vivaracho salio con plomo en el ala pero para remate al final ya en la calle la mujer(extranjera) le dejo el pelero para su carraplana. Este mal ejemplo de “buropatia” se fue por un barranco cuando la soberbia lo hundió teniendo un rabo de paja del tamaño de un pavo real. Sin embargo, hay otros más humildes e inteligentes que en aprontes parecidos andan nadando en la flor y nata de sus oportunas decisiones al ser amables y divertidos con los “amos”del Tesoro Nacional.

Otros “buropatas” se mantenían en la “izquierda” pero con el corazón a la derecha razón por la cual se gozaron la IV en eso de los negocios con AD-COPEI-MAS pero llegado este momento de locura “revolucionaria” pasar del modesto apartamento en cualquier barriada a la esplendida Mansión capitalina no haciendo nada extraordinario que no sea ampliar su radio de acción de los tiempos del ayer y claro aumentando las comisiones a los facilitadores de los negocios.

En definitiva, no hay nada nuevo bajo el sol de los aventajados “burochorocratas” en funciones ahora cambian los anémicos bolívares por dólares y los mandan bien lejos mientras llega la hora de partir. Lo maluco de esta actividad es que el Imperio hace cacería sobre estos Capitales Burocráticos y esto los pone nerviosillos. Colorin, colorado, este cuento esta ilustrado.

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