Por: Jesús Alberto Castillo
El domingo pasado fui con Carlos Chacón, candidato del MAS a la AN por el circuito 3, al contacto directo en la zona alta del Municipio Mejía. Julián Frontado, dirigente masista de Marigüitar nos acompañó en esta apasionante tarea. Antes de subir a Paradero avistamos Pericantar y decidimos visitar a Miguel Jiménez, viejo compañero de lucha. Lo encontramos, en la quietud de la tarde y con un clima agradable, escuchando canciones de Alí Primera. Miguelito, como le decimos cariñosamente, acostado en un chinchorro debajo de una majestuosa churuata nos recibió cordialmente. Hablamos de música, de la vida cotidiana y, por supuesto, de política, una de las más complejas actividades del ser humano. Su esposa Luisa escuchaba atentamente, mientras degustábamos unas frescas cerezas que arrancamos de una mata que servía de centinela en el sitio.
Miguelito hablaba de nuestra osadía en la política sucrense. Tenía opiniones de algunos miembros de la MUD muy duras contra el MAS al salirse de esa coalición para favorecer al gobierno. ¿Hasta qué punto se interpretaría como un acto de división mediante un acuerdo soterrado con el oficialismo? Sus palabras iban develando la preocupación del amigo de tantas batallas. El rostro del docente se hacía reflexivo a medida que hablaba, mientras “La noche del jabalí”, se escuchaba en derredor. Chacón, Julián y yo lo escuchábamos pacientemente. No había en él la malicia de algunos voceros de la MUD que han desatado una feroz campaña contra el MAS sin argumentos, tan sólo para tapar sus errores políticos. La sinceridad de Miguelito nos obligó a aclarar algunos aspectos. Era nuestro deber con el luchador y hermano de siempre.
¿Es divisionista el MAS con la MUD? Por supuesto que no. El MAS ha puesto en la calle una política que anunció hace más de 2 años. Ir al encuentro de los desencantados del oficialismo y la MUD para reconciliar el país. Busca romper la polarización que ha dañado al país y sólo beneficia al gobierno. El MAS no divide a la MUD porque sus antiguos militantes están hoy en el oficialismo. Se quedaron allí al apoyar a Chávez en el Polo Patriótico. Sucre no es la excepción. El viejo masismo está hoy en el chavismo. Aunque se encuentre decepcionado no votaría votaría por la MUD porque la asocian al pasado. Los resultados electorales así lo reflejan. El MAS comprendió eso y busca recuperar su activo electoral ante el desplome oficial. Eso es estrategia política. Al sacar a sus viejos militantes del gobierno beneficia a la MUD. Simple deducción matemática.
Otro cuento de algunos voceros de la MUD es que el MAS tiene negocios oscuros con el gobierno. ¿Quién juega más a favor del chavismo, el que se va sólo al ruedo político o el que llama a un país entero a dejarle el camino libre al oficialismo? En el 2005 un vocero opositor convocó a retirarse de las parlamentarias porque así lo exigía el país. ¿Fue señalado de traidor o de recibir dinero del gobierno? Claro que no. Hoy es premiado a candidato a la AN por Caracas. ¡Eso pareciera olvidarse en la mente de quienes hoy atacan al MAS! Si este partido no tiene votos ¿por qué se preocupan de que vaya solo? Algo debe estar pasando con el MAS. En la MUD-Sucre tenemos grandes amigos. Pero era necesario romper con la hegemonía de 4 partidos que la han llevado a un callejón sin salida. ¿Cómo entender su reciente decisión electoral? Uno de los “partidos mayoritarios” encabeza la lista y agarra el Circuito 1, sacrificando un liderazgo con sabor a triunfo. En el circuito 2 ponen un candidato con vasta formación académica, pero sin arraigo en la zona. En el circuito 3 va una candidatura con poca vivencia en Sucre; más allá de sus méritos propios, es desconocida y afecta la dupla. El descontento ha surgido. Entonces, ¿quién divide?
Alguien pudiera pensar que el gobierno metió las manos en todo esto. Pero afirmarlo sería irresponsable, tal como ocurre con los que satanizan al MAS. Sorprende que quienes hoy propician esta campaña se han lanzado fuera de la MUD o han apoyado figuras pro oficialismo. Otros han pasado por varios partidos y hoy se resignan a que “si le ponen un burro votarían con los ojos cerrados”. Gran paradoja en el Santo Tribunal de la Inquisición. Mientras tanto el MAS anda en la calle con candidatos independientes para robustecer el liderazgo sucrense, sin importar que le arrojen piedras. Eso es una buena señal. Miguelito nos escuchó atentamente. Al despedirnos lo notamos pensativo. Nos marchamos camino arriba. Mañana será otro día en la vida de este gran luchador social.
El domingo pasado fui con Carlos Chacón, candidato del MAS a la AN por el circuito 3, al contacto directo en la zona alta del Municipio Mejía. Julián Frontado, dirigente masista de Marigüitar nos acompañó en esta apasionante tarea. Antes de subir a Paradero avistamos Pericantar y decidimos visitar a Miguel Jiménez, viejo compañero de lucha. Lo encontramos, en la quietud de la tarde y con un clima agradable, escuchando canciones de Alí Primera. Miguelito, como le decimos cariñosamente, acostado en un chinchorro debajo de una majestuosa churuata nos recibió cordialmente. Hablamos de música, de la vida cotidiana y, por supuesto, de política, una de las más complejas actividades del ser humano. Su esposa Luisa escuchaba atentamente, mientras degustábamos unas frescas cerezas que arrancamos de una mata que servía de centinela en el sitio.
Miguelito hablaba de nuestra osadía en la política sucrense. Tenía opiniones de algunos miembros de la MUD muy duras contra el MAS al salirse de esa coalición para favorecer al gobierno. ¿Hasta qué punto se interpretaría como un acto de división mediante un acuerdo soterrado con el oficialismo? Sus palabras iban develando la preocupación del amigo de tantas batallas. El rostro del docente se hacía reflexivo a medida que hablaba, mientras “La noche del jabalí”, se escuchaba en derredor. Chacón, Julián y yo lo escuchábamos pacientemente. No había en él la malicia de algunos voceros de la MUD que han desatado una feroz campaña contra el MAS sin argumentos, tan sólo para tapar sus errores políticos. La sinceridad de Miguelito nos obligó a aclarar algunos aspectos. Era nuestro deber con el luchador y hermano de siempre.
¿Es divisionista el MAS con la MUD? Por supuesto que no. El MAS ha puesto en la calle una política que anunció hace más de 2 años. Ir al encuentro de los desencantados del oficialismo y la MUD para reconciliar el país. Busca romper la polarización que ha dañado al país y sólo beneficia al gobierno. El MAS no divide a la MUD porque sus antiguos militantes están hoy en el oficialismo. Se quedaron allí al apoyar a Chávez en el Polo Patriótico. Sucre no es la excepción. El viejo masismo está hoy en el chavismo. Aunque se encuentre decepcionado no votaría votaría por la MUD porque la asocian al pasado. Los resultados electorales así lo reflejan. El MAS comprendió eso y busca recuperar su activo electoral ante el desplome oficial. Eso es estrategia política. Al sacar a sus viejos militantes del gobierno beneficia a la MUD. Simple deducción matemática.
Otro cuento de algunos voceros de la MUD es que el MAS tiene negocios oscuros con el gobierno. ¿Quién juega más a favor del chavismo, el que se va sólo al ruedo político o el que llama a un país entero a dejarle el camino libre al oficialismo? En el 2005 un vocero opositor convocó a retirarse de las parlamentarias porque así lo exigía el país. ¿Fue señalado de traidor o de recibir dinero del gobierno? Claro que no. Hoy es premiado a candidato a la AN por Caracas. ¡Eso pareciera olvidarse en la mente de quienes hoy atacan al MAS! Si este partido no tiene votos ¿por qué se preocupan de que vaya solo? Algo debe estar pasando con el MAS. En la MUD-Sucre tenemos grandes amigos. Pero era necesario romper con la hegemonía de 4 partidos que la han llevado a un callejón sin salida. ¿Cómo entender su reciente decisión electoral? Uno de los “partidos mayoritarios” encabeza la lista y agarra el Circuito 1, sacrificando un liderazgo con sabor a triunfo. En el circuito 2 ponen un candidato con vasta formación académica, pero sin arraigo en la zona. En el circuito 3 va una candidatura con poca vivencia en Sucre; más allá de sus méritos propios, es desconocida y afecta la dupla. El descontento ha surgido. Entonces, ¿quién divide?
Alguien pudiera pensar que el gobierno metió las manos en todo esto. Pero afirmarlo sería irresponsable, tal como ocurre con los que satanizan al MAS. Sorprende que quienes hoy propician esta campaña se han lanzado fuera de la MUD o han apoyado figuras pro oficialismo. Otros han pasado por varios partidos y hoy se resignan a que “si le ponen un burro votarían con los ojos cerrados”. Gran paradoja en el Santo Tribunal de la Inquisición. Mientras tanto el MAS anda en la calle con candidatos independientes para robustecer el liderazgo sucrense, sin importar que le arrojen piedras. Eso es una buena señal. Miguelito nos escuchó atentamente. Al despedirnos lo notamos pensativo. Nos marchamos camino arriba. Mañana será otro día en la vida de este gran luchador social.
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