jueves, 9 de julio de 2015

Opinión: Post-honestos

Por: ECON. TONY RIVERA CHAVEZ
torivera@terra.com

Las fuerzas constituidas por las conductas de los sujetos en funciones políticas en la Venezuela del petróleo y en menor medida antes de ella se caracterizan por ciertas ideas acriticas y sin estímulos morales para quienes en la practica combaten la corrupción por cuanto esta se expresa subterráneamente como una energía cósmica en tiempos sagrados y todo cuanto se opone a ella es profano.

Esto ocurre aun cuando el hombre no lo exprese porque es parte de una cultura del “mejor vivir” del venezolano o como quien dice “no se le deben buscar las cuatro patas al gato”. Es conducta de nuestro “políticos”la de rasgarse las vestiduras abandonado el Poder para criticar las actividades corruptas de otros lo cual por cierto esta focalizado en uno que otro “enemigo”necesario para aspirar nuevamente al retorno a la burochorocracia pero ¡jamás¡ se los oye en una predica radical contra las verdaderas causas de la deshonestidad en la función publica por que su concepción del mundo esencialmente esta impregnada del oportunismo cómplice y de hecho del beneficio de esta forma de pensar “liberal” ante los orígenes reales de estas actividades de quienes muchas veces no son piezas aisladas si no parte de un Sistema Administrativo construido por y para facilitar la vigencia de la corrupción. Se establecen los grupos o pandillas Política-Económicas en forma de partidos o movimientos con filosofías o credos religiosos-morales permisivos hacia la tolerancia de todo cuanto acelera y beneficia el desarrollo de la burocracia que convertida en burocratismo robustece la acción malvada contra la honestidad en las cúpulas de Poder desde el “Centralismo Burocrático”. Existe por otra parte una especie de Código secreto implícito en el nombramiento de los tecnócratas los cuales pueden no ser corruptos pero nunca anti-corruptos al punto de perseguir en su área a los pillos de la Cosa Publica a sabiendas de que seria “sentencia a muerte” contra el osado en este mundo donde ser corrupto es chévere y donde el principio de dejar hacer, dejar pasar como la mejor filosofía para la felicidad en el desempeño de sus funciones a los burócratas que por lo demás le da “autoridad inmoral” para hacer sus “negocitos” si las circunstancias lo requieren.

Las estrellas de la política venezolana son aquellos los cuales en un tono de neutralidad predican la vida de la mejor manera para vender sus ambiciones y su falta de valor ante las poderosas fuerzas de los corruptos sin dar batalla alguna contra el mal eterno del robo de los Fondos Públicos y se presentan con formulas mágicas para desaparecer la Delincuencia Fiscal Organizada solamente “técnicas”. Existió en la Cuarta uno de estos ejemplares o modelos de la corrupción el cual exigio sueldos comparables a las empresas privadas en el Seniat para acabar con la corrupción El Centralismo Burocrático aprobó el remedio pero la enfermedad se hizo crónica y no soluciono nada.El asunto es que por razones de complicidad y aprovechamiento la burocracia es conciliatoria con los delincuentes.Este burócrata será siempre un hombre bueno para quienes ven la sociedad como algo contemplativo sobre todo si se tiene espíritu cobarde ante quienes han convertido la función publica en “mafia” necesaria para la buena vida de parte de la sociedad donde destacan burgueses,sindicalistas,militares,tecnócratas,gestores,politicos,lumpenburguesia importadora,jueces,policias, ludópatas y pare usted de contar eslabones en esta cadena socio-económica nacida desde una concepción del mundo donde la desigualdad permite y sostiene la presencia del “aprovechador” como un elemento importante de la sociedad el cual algunas veces hasta le sale un “Honoris Causa” desde una Universidad que lo convierte en Doctor Honorario para afrontar cualquier critica materialista pecadora contra el sector.

Por ahora dado el panorama parece ser que nadie en el ejercicio del poder real se hace eco de una concepción revolucionaria en la vida practica y se elevaría en una conducta

Marxista como una forma distinta si no que la filosofía “greco-religiosa” seguirá alcahueteando los malos espíritus de la corrupción.

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