Por: TONY RIVERA CHAVEZ
profetanoskagamus@yahoo.com
Reciclando tiempos del deber cumplido recordé cuando casi fui despedido del MinHacienda siendo Inspector General de Hacienda y responsable de la Unidad de Otros Ingresos donde se analizaban las planillas de liquidación y la recaudación por Derechos Consulares detectando una diferencia significativa entre lo liquidado y recaudado por lo cual publique en la prensa dado los procedimientos del caso a los implicados en esta morosidad en el asunto y estos privilegiados funcionarios arremetieron contra mi por cumplir con mi deber salvándome de un despido por la presencia de un Ministro no partidista que capeo la ira de los morosos y morosas. Hoy día cuando se observa a los empleados de Embajadas o Consulados como un refugio de corruptos en buena parte de la representación exterior de la Nación supone una larga lucha entre la Comisión de Contraloría desde la Asamblea Nacional porque sin duda alguna gran cantidad de dinero debe estar por recaudar dada la estructura de corrupción establecida por estos años cuando “ser corrupto, es chévere”.
Sin duda hay elementos importantes que ocupan la atención de los venezolanos por su cuantía y sus autores pero hay que no dejarse llevar por la pasión olvidándose de establecer un sistema al detalle contra el mal manejo de los Fondos Públicos. No debe existir perdón alguno por mínima que sea la cantidad bajo el control de los corruptos para investigar y establecer los expedientes respectivos para enjuiciar a la Delincuencia Burocrática Organizada.En Venezuela, por la tradición de los corruptos y sus acciones se tiende “a dejar pasar” cuando los políticos consideran minucias ciertas malas mañas de los funcionarios como un derecho consuetudinario para tomar algo para si sin mayores problemas. Hay que limpiar la Administración Publica de pillos por pequeños que sean porque de paso son estos los que le dan oxigeno y apoyo a los grandes corruptos y a los políticos dedicados a vender demagogia. Los que reparten bolsas de comida en los complejos habitacionales (Misión Vivienda) son concientes de que los de arriba se lucran indebidamente con esto y por eso también en menor escala meten la mano. El pequeño ejemplo nos da una idea de la dinámica de la corrupción y de su complejidad.
El llamado entonces es el ataque a fondo contra todo esto por pequeño que sea pero que contemple la perdida, malversación o robo de los Fondos Públicos. Esto debe ser la Gran Batalla Nacional para recuperar no solo miles de millones de dólares, sino la ética y moral en el manejo de los Fondos Públicos los cuales desde hace tiempo se han convertido en pila de agua bendita donde como en un gran Pozo de la Dicha han servido para el baño de la burochorocracia para salir elevados al Reino de la Bonanza donde gracias a las apariencias es fácil determinar quien es honesto o no. Solo ver los objetos exhibidos como relojes de marca, vehículos de último modelo etc. Son prueba presunta para determinar el Contincoleo ejercido sobre los dineros del Estado. Y para evitar para que se salgan con la suya viejos corruptos “chéveres” se debe volver al pasado y también investigar, juzgar y condenar a esa clase corrupta de años pasados para nivelar esta batalla la cual debe ir contra TODOS los que han herido el corazón de las Finanzas Publicas. La Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional tiene ante si una tarea excepcional pero así mismo puede hacer de esta función de Control Fiscal algo digno de un sistema político que se considere democrático porque no se trata de meter a la cárcel a unos burochorocratas sino de adecentar la función administrativa desde el Estado para construir un País productivo, honesto y de abundancia.
profetanoskagamus@yahoo.com
Reciclando tiempos del deber cumplido recordé cuando casi fui despedido del MinHacienda siendo Inspector General de Hacienda y responsable de la Unidad de Otros Ingresos donde se analizaban las planillas de liquidación y la recaudación por Derechos Consulares detectando una diferencia significativa entre lo liquidado y recaudado por lo cual publique en la prensa dado los procedimientos del caso a los implicados en esta morosidad en el asunto y estos privilegiados funcionarios arremetieron contra mi por cumplir con mi deber salvándome de un despido por la presencia de un Ministro no partidista que capeo la ira de los morosos y morosas. Hoy día cuando se observa a los empleados de Embajadas o Consulados como un refugio de corruptos en buena parte de la representación exterior de la Nación supone una larga lucha entre la Comisión de Contraloría desde la Asamblea Nacional porque sin duda alguna gran cantidad de dinero debe estar por recaudar dada la estructura de corrupción establecida por estos años cuando “ser corrupto, es chévere”.
Sin duda hay elementos importantes que ocupan la atención de los venezolanos por su cuantía y sus autores pero hay que no dejarse llevar por la pasión olvidándose de establecer un sistema al detalle contra el mal manejo de los Fondos Públicos. No debe existir perdón alguno por mínima que sea la cantidad bajo el control de los corruptos para investigar y establecer los expedientes respectivos para enjuiciar a la Delincuencia Burocrática Organizada.En Venezuela, por la tradición de los corruptos y sus acciones se tiende “a dejar pasar” cuando los políticos consideran minucias ciertas malas mañas de los funcionarios como un derecho consuetudinario para tomar algo para si sin mayores problemas. Hay que limpiar la Administración Publica de pillos por pequeños que sean porque de paso son estos los que le dan oxigeno y apoyo a los grandes corruptos y a los políticos dedicados a vender demagogia. Los que reparten bolsas de comida en los complejos habitacionales (Misión Vivienda) son concientes de que los de arriba se lucran indebidamente con esto y por eso también en menor escala meten la mano. El pequeño ejemplo nos da una idea de la dinámica de la corrupción y de su complejidad.
El llamado entonces es el ataque a fondo contra todo esto por pequeño que sea pero que contemple la perdida, malversación o robo de los Fondos Públicos. Esto debe ser la Gran Batalla Nacional para recuperar no solo miles de millones de dólares, sino la ética y moral en el manejo de los Fondos Públicos los cuales desde hace tiempo se han convertido en pila de agua bendita donde como en un gran Pozo de la Dicha han servido para el baño de la burochorocracia para salir elevados al Reino de la Bonanza donde gracias a las apariencias es fácil determinar quien es honesto o no. Solo ver los objetos exhibidos como relojes de marca, vehículos de último modelo etc. Son prueba presunta para determinar el Contincoleo ejercido sobre los dineros del Estado. Y para evitar para que se salgan con la suya viejos corruptos “chéveres” se debe volver al pasado y también investigar, juzgar y condenar a esa clase corrupta de años pasados para nivelar esta batalla la cual debe ir contra TODOS los que han herido el corazón de las Finanzas Publicas. La Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional tiene ante si una tarea excepcional pero así mismo puede hacer de esta función de Control Fiscal algo digno de un sistema político que se considere democrático porque no se trata de meter a la cárcel a unos burochorocratas sino de adecentar la función administrativa desde el Estado para construir un País productivo, honesto y de abundancia.
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