Por: TONY RIVERA CHAVEZ
profetanoskagamus@yahoo.com
Las calles largas y estrechas de Cumana eran un caluroso filtro para las emociones albergadas desde la militancia revolucionaria donde no había espacio ni tiempo donde no se derramara la inquietud por el “socialismo científico” en aquellos años cuando el asalto al cielo era parte del combate diario en ilusas fantasías de justicia.
La pinta callejera matizada por el fresco de la madrugada y el canto de uno que otro gallo trasnochado era parte de la tarea obligatoria para mantener la acción viva. Los trabajadores dormían y los pastores de nubes hacíamos la propaganda para el mercado político de las ideas con grandes riesgos cuando la represión atrapaba cualquier vestigio rebelde contra el sistema. Moscas atrapadas, frágiles e indefensos navegando en cuentos de ciencia. Se nos adoctrinaba bajo el mañana del “socialismo científico” en contraposición a los irrealizables de las utopías con carácter generosos. La Ciencia en todos sus aspectos llevaría la Patria socialista al mundo comunista donde la abundancia estaría de tal manera calculada por la Planificación Económica que en cada mesa del camarada llegaría todo lo necesario para una vida con salud y energía. Engels y Marx, toda una vida dedicados a estas profecías eran como para hacerles caso porque además lo material se había tejido sobre lo ideal para envolvernos en una hazaña por la vida donde el Dios seria el propio trabajador quien desde el Estado daría ordenes para construir un Paraíso para los obreros donde el malvado explotador no seria el burgués si no un burócrata ejemplar.En este cuento uno se daba el vuelto aun cuando nunca se le veía la ganancia a la actividad.
Pasaron muchos años en este trajín hacia el bendito socialismo científico y lee y lee Métodos, procedimientos y normas para construirlo. De improviso en día soleado se aparece la tempestad militar y de un zarpazo arrebata a los estudiosos del marxismo el tal socialismo y todo se derrumba cuando sin mas ni menos el socialismo científico es lanzado al cesto de la basura al igual que la sagrada moralidad por el respeto revolucionario hacia los Fondos Públicos convertidos en lucro personal de los socialistas uniformados. Los mismos repartidores del “palo patriótico” transformados por el tiempo en administradores de la justicia y los dineros del pueblo. La anestesia de las primeras operaciones fueron suficientes para a corto plazo ver quemar en la hoguera de la demagogia todo aquello de El Capital.la Dialéctica de la Naturaleza, el Materialismo Histórico y Dialéctico y muchos otros textos cuando mas bien la brujería se apoderaba del pensamiento de cambio desde el Poder y hasta El Libertador cayo bajo las terribles manos de los hechiceros para buscar en magias e ilusiones el Poder Eterno.
La naturaleza es Ciencia y por efecto de la vida practica hasta los profanadores de tumba siguen el retorno eterno hacia la conversión por lo de “polvo eres y en polvo te convertirás” Una pandilla de militares se “chupo” los sueños científicos y hoy día tenemos a una burocracia ignorante dirigiendo la destrucción de la Nación que la Ciencia socialista aplicada al campo social debe tener como guía para la acción lo de : “ Saber para proveer, proveer para actuar” o sea Planificar ¡Vaya aterrizaje¡. El socialismo sin Ciencia ha llegado para quitarnos de la mesa hasta los platos más proletarios como la caraota, el arroz, las posturas y el plátano. ¡No somos nada¡
Mientras los oportunistas se gozan el socialismo con la consigna: Patria, parrilla y güisqui (mayor edad).. Arrepentirse es poco y la promesa abarca irse de rodillas desde Cumana hasta Guiria pidiéndole perdón a los adecos y copeyanos.
profetanoskagamus@yahoo.com
Las calles largas y estrechas de Cumana eran un caluroso filtro para las emociones albergadas desde la militancia revolucionaria donde no había espacio ni tiempo donde no se derramara la inquietud por el “socialismo científico” en aquellos años cuando el asalto al cielo era parte del combate diario en ilusas fantasías de justicia.
La pinta callejera matizada por el fresco de la madrugada y el canto de uno que otro gallo trasnochado era parte de la tarea obligatoria para mantener la acción viva. Los trabajadores dormían y los pastores de nubes hacíamos la propaganda para el mercado político de las ideas con grandes riesgos cuando la represión atrapaba cualquier vestigio rebelde contra el sistema. Moscas atrapadas, frágiles e indefensos navegando en cuentos de ciencia. Se nos adoctrinaba bajo el mañana del “socialismo científico” en contraposición a los irrealizables de las utopías con carácter generosos. La Ciencia en todos sus aspectos llevaría la Patria socialista al mundo comunista donde la abundancia estaría de tal manera calculada por la Planificación Económica que en cada mesa del camarada llegaría todo lo necesario para una vida con salud y energía. Engels y Marx, toda una vida dedicados a estas profecías eran como para hacerles caso porque además lo material se había tejido sobre lo ideal para envolvernos en una hazaña por la vida donde el Dios seria el propio trabajador quien desde el Estado daría ordenes para construir un Paraíso para los obreros donde el malvado explotador no seria el burgués si no un burócrata ejemplar.En este cuento uno se daba el vuelto aun cuando nunca se le veía la ganancia a la actividad.
Pasaron muchos años en este trajín hacia el bendito socialismo científico y lee y lee Métodos, procedimientos y normas para construirlo. De improviso en día soleado se aparece la tempestad militar y de un zarpazo arrebata a los estudiosos del marxismo el tal socialismo y todo se derrumba cuando sin mas ni menos el socialismo científico es lanzado al cesto de la basura al igual que la sagrada moralidad por el respeto revolucionario hacia los Fondos Públicos convertidos en lucro personal de los socialistas uniformados. Los mismos repartidores del “palo patriótico” transformados por el tiempo en administradores de la justicia y los dineros del pueblo. La anestesia de las primeras operaciones fueron suficientes para a corto plazo ver quemar en la hoguera de la demagogia todo aquello de El Capital.la Dialéctica de la Naturaleza, el Materialismo Histórico y Dialéctico y muchos otros textos cuando mas bien la brujería se apoderaba del pensamiento de cambio desde el Poder y hasta El Libertador cayo bajo las terribles manos de los hechiceros para buscar en magias e ilusiones el Poder Eterno.
La naturaleza es Ciencia y por efecto de la vida practica hasta los profanadores de tumba siguen el retorno eterno hacia la conversión por lo de “polvo eres y en polvo te convertirás” Una pandilla de militares se “chupo” los sueños científicos y hoy día tenemos a una burocracia ignorante dirigiendo la destrucción de la Nación que la Ciencia socialista aplicada al campo social debe tener como guía para la acción lo de : “ Saber para proveer, proveer para actuar” o sea Planificar ¡Vaya aterrizaje¡. El socialismo sin Ciencia ha llegado para quitarnos de la mesa hasta los platos más proletarios como la caraota, el arroz, las posturas y el plátano. ¡No somos nada¡
Mientras los oportunistas se gozan el socialismo con la consigna: Patria, parrilla y güisqui (mayor edad).. Arrepentirse es poco y la promesa abarca irse de rodillas desde Cumana hasta Guiria pidiéndole perdón a los adecos y copeyanos.
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