Caracas - Según un diagnóstico técnico del Colegio de Ingenieros de Venezuela (CIV), el 70% de la vialidad estaba en pésimas condiciones ante las fuertes lluvias registradas los dos últimos meses del 2010. Al día de hoy, la gravedad de la vialidad alcanza un 90% de imperfección, limitando el libre tránsito y ocasionando la pérdida de vidas.
"El 90% de las vías están intransitable por la falta de inversión y mantenimiento. No existe una autopista que brinde seguridad y confort a los conductores las 24 horas del día", denunció Enzo Betancourt, presidente del CIV.
Los estándares internacionales de vialidad, recogen como prioridad que las vías ofrezcan servicialidad, confort y seguridad, lo que a juicio de Betancour, en todo el territorio nacional no existe tramo que proporcione esas tres condiciones.
"Cuando alguien transita por cualquier región, se encuentra con un kilómetro en buen estado, luego se topa con ocho kilómetros como un campo de guerra, y viceversa. Esta situación de falta de mantenimiento impide que las tres condiciones vitales para salvaguardar al conductor, se obtengan".
El diagnóstico del CIV arroja que la vía que conecta a Caracas con los estados orientales es la más perjudicada. La crisis se inicia desde Caucagua, en el estado Miranda.
Desde Caucagua hasta El Guapo se contabilizan centenares de huecos, falta de iluminación e inseguridad desbordante. La pésima vialidad ha ocasionado múltiples volcamientos de vehículos y la muerte incluso de familias enteras. Otro paseo lunar se encuentra en Boca de Uchire y Clarines, zonas que con las lluvias, se forman lagunas invisibles imposibles de obviar por los choferes.
"Luego de un aguacero casi me mato en Clarines. Mi carro cayó en una batea repleta de agua. No sólo me fracturé un brazo y la pierna izquierda, sino también perdí mi método de trabajo", contó César León, quien es vendedor y utiliza el trayecto semanalmente.
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