Es un río al que bautizaron con ese nombre porque efectivamente el agua se ve casi de ese color. Su aspecto pudiera ser por el persistente chocar del agua con las rocas y porque, según los lugareños, las montañas por donde se pasea el río están compuestas de roca caliza. Este lugar frondoso se encuentra en el municipio Montes del estado Sucre. Luego de llegar a Cumanacoa (desde Cumaná) arribas al balneario Los Dos Ríos, allí cruzas a la izquierda y continúas por 7 kilómetros aproximadamente (20 minutos en vehículo). Es una vía agrícola y está en buenas condiciones (en 2011). Los carros pequeños pueden pasar sin problemas. En la travesía disfrutarás de un paisaje hermoso, tapizado por una gama de verdes que lo hacen una espléndida obra del Padre Creador. Al llegar al caserío de Agua Blanca, podrás pernotar y ser atendido por los propios habitantes del lugar, quienes te sabrán guiar para apreciar y disfrutar varias caídas de agua y pozas de diferentes profundidades y de temperatura agradable.
Aguas de Poa
En medio de la vía encontrarás una hacienda con un gran terreno llano. La misma está comenzando a florecer como atractivo turístico, se llama Las Aguas de Poa. Allí encontrarás a un lugareño llamado Poa, propietario del lugar, el cual te atenderá de una manera cordial y simpática, como acostumbra hacer el sucrense; te ofrece una atención esmerada para que tu estancia sea la más placentera. En el lugar hay dos pozas donde te bañarás de una manera segura, también tiene un trapiche que tritura la caña de azúcar y al instante puedes deleitarte con guarapo de caña recién hecho. En el atractivo turístico lograrás disfrutar del río, hacer comida, descansar y dejarte persuadir por la inmensidad de las montañas y la belleza del paisaje en su conjunto. (Prensa Corsotur)
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