Con cantos y al ritmo del joropo oriental, los cumaneses aplaudieron el encendido de la Cruz en el Castillo San Antonio de la Eminencia en la capital del estado Sucre, una tradición que da la bienvenida a las fiestas decembrinas.
El encendido lo hizo la comunidad de San Francisco, sector donde se ubica la Cruz, junto a representantes de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) y la primera dama del estado, Alejandra Vallejo de Maestre.
La Cruz, apostada en el Guardián de la Ciudad, como también se le conoce al castillo, da paso a la Navidad y se mantendrá encendida hasta el 21 de enero, cuando los cumaneses conmemorarán el Día de su Patrona: Santa Inés.
El director de Operaciones de Corpoelec-Sucre, José Sánchez, manifestó que desde hace una década se encargan de garantizar las luminarias para el encendido de la Cruz, como resultado de la labor mancomunada entre el Gobierno sucrense y la estatal eléctrica.
"Logramos encender la Cruz y este año, como el anterior, lo realizamos con bombillos de bajo consumo energético, esperando que esta luz llene de paz y amor al pueblo de Cumaná", expresó.
Por su parte, Roselia Vásquez, vocera del Consejo Comunal San Francisco I, manifestó que el encendido forma parte de las tradiciones en esta época decembrina para iluminar la llegada del niño Jesús.
Contó que esta tradición en el Castillo San Antonio de la Eminencia comenzó en el año 1918 por iniciativa de los cumaneses y desde entonces es esperado el encendido cada primero de diciembre.
La fortaleza fue construida entre 1659 y 1686 en el cerro Pan de Azúcar de Cumaná, desde donde domina la ciudad oriental y se observa el golfo de Cariaco y la península de Araya. Fue la fortificación más importante que protegía a la capital sucrense, con un diseño de estrella de cuatro puntas que señalan los puntos cardinales.
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