Opinión: No hay mal que por bien no venga

Por: Fernando Morgado Bossio

Me permito utilizar este viejo y trillado proverbio, como título del artículo de hoy, porque asocia con mucha afinidad el sublime y puro significado de la idea que pretendo desarrollar, ya que es de gran importancia. El extraordinario líder de la oposición, Henrique Capriles Radonsky, que de alguna forma sobrenatural, nos envió la Santísima Virgen María, bajo la advocación de la Virgen del Valle, no resultó electo como Presidente de la República, en las recientes elecciones, para el período 1913 -1919, por alguna elevada, y por ahora secreta, razón muy poderosa, que Dios Nuestro Señor, debe tener todavía muy bien guardadita y reservada. Sobre la cual tenemos algunas consideraciones que comentar.
Se me ocurre pensar en voz alta para decir que: Para mí, y por lo visto, para más de seis millones y medio de personas que piensan como yo, esas elecciones las debía haber ganado por mucho, el candidato Capriles, pero conociendo a los contrincantes, su idiosincrasia y lo que ellos sabían que se estaban jugando, intuíamos que lanzarían a sus huestes a las calles, llenos de odio y armados hasta los dientes, con órdenes de asesinar y destrozar todo a su paso, y ante esa devastadora alternativa y después de haber soportado catorce dolorosos años, qué importaba soportar un poco más en espera de la “Justicia Divina”, y Dios les alargó un poco el tiempo, mientras se esperaba una mejor ocasión. Conste que es sólo una suposición mía, muy personal.

¡Que esto no pasa de ser una vana ilusión! es posible y no la discuto, todo es factible, pero a mí me suena tan bella e ideal, que la doy por cierta, sin que dañe a nadie, pero sin duda que nos llena de esperanzas y de ilusiones, en el deseo de poder tener muy pronto, un nuevo sistema de gobierno, que nos permita a todos vivir mejor, en sana paz y entre hermanos, como tiene que ser. En un país donde administremos con equidad y honradez los recursos y riquezas de la nación, y los repartamos entre todos por igual, con un hombre como Henrique Capriles a la cabeza, seguido de todos los jóvenes que lo acompañan, de todos los estratos sociales, preparados, estudiosos, bien intencionados, honrados y dispuestos a dar la vida por el futuro del país. Una nueva generación con nuevas y buenas ideas, dispuestas a rescatar el país de este antro de perdición que tenemos.

Es imprescindible mantener la unidad de todas las corrientes democráticas y progresistas de la sociedad venezolana: Los Partidos Políticos organizados, de las viejas y nuevas generaciones, La Iglesia Católica Venezolana y todas las demás asociaciones Cristianas y de otras tendencias Religiosas, que de seguro tendrán muchos y buenos aportes que hacer. Todas las Universidades del País y demás Institutos de Estudios Superiores, Todas las Juntas Directivas de los Colegios de Profesionales y Técnicos. Los Sindicatos de trabajadores y empleados organizados y legalizados. Todos los Intelectuales activos del País, particularmente los que han ocupado cargos y posiciones importantes y descollantes en los Gobiernos e Instituciones Privadas Nacionales e Internacionales, que nos iluminen con sus sabios conocimientos. Los Medios de Comunicación de todas las especialidades y tendencias. Los Periodistas, los profesionales con deseos de colaborar. Los Empresarios del país, desde el más pequeño hasta el más Importante y las Juntas Directivas y ex directores de todas las Organismos empresariales, y todas aquellas personas o instituciones que pueda haber olvidado involuntariamente. A todos convoco a formar parte de este gran Nuevo País que necesitamos para beneficio de la generalidad de los venezolanos nacidos o venidos.

Llegó el momento decisivo, no puede haber más espera ni excusas. Nuestro País nos llama a gritos, para formar el gran frente patriótico de la UNIDAD, porque de no hacerlo, nos exponemos a perderlo para siempre. Hay intereses poderosísimos dentro y fuera del país, decididos a acabarlo y/o a quedarse con él, y eso no podemos permitirlo. Hacemos también un respetuoso y sincero llamado a nuestras FUERZAS ARMADAS NACIONALES INSTITUCIONALES, para que participen de esta convocatoria y toma de decisiones en su importante responsabilidad como garantes de la seguridad y soberanía de la patria, así como en su insoslayable condición de Venezolanos nacidos en suelo patrio, al que estamos seguros que aman y defienden como el que más.