Opinión: Responsabilidad de reconstructores

Por: JOSE ISIDRO CORDERO

Es evidente, la memoria siempre es el pasado, el pensamiento es el futuro; pero sin la ayuda de la primera el segundo no encuentra asiento. Para poder formular sus propuestas, el pensamiento se mantiene en constante consulta con la memoria; de no ser así, se quedaría estático, o a lo sumo, al querer avanzar sin ella se dislocaría. En esa relación dialéctica, la memoria, que adopta posición pasiva, deja la iniciativa de acción al pensamiento y entonces se concreta un elemento denominado conciencia que asume tareas específicas y decisivas. En la Venezuela que hoy despierta a una nueva realidad, la tarea de la conciencia, regada en el ámbito colectivo, se presiente de gran intensidad.

Quien haya sido favorecido con el mandato de dirigir los destinos del país, no tendrá otra opción primaria, sino la de conducir sus pasos hacia una perspectiva de reconstrucción de la vida nacional poniendo el pensamiento en proyección hacia el futuro; recurriendo a la memoria sólo para evitar cometer los errores que, de alguna manera, nos han puesto en situaciones convalecientes; tanto la oposición como el gobierno, ya sea aquélla éste o éste aquélla, tendrán que amoldarse al criterio de que el expresidente Chávez dejó de ser una referencia dentro del dinamismo que requiere la República para encontrar caminos de salvación. La hora presente, la del pensamiento en acción, nos conmina a asumir la responsabilidad de reconstruir, con los materiales que nos quedan en las manos, el país que siempre hemos querido ser.

La responsabilidad de reconstruir pasa por la instancia de la conciencia, que sugiere la necesidad de reconocernos como hermanos, hijos de una misma tierra que, para dar buenos frutos, exige ser cultivada bajo el cobijo de la paz; con la voluntad de la compresión; con el entusiasmo de la convivencia y con el cariño de la solidaridad. Si prescindimos de esos gestos animados por los susurros de la autosuficiencia, por las caricias de la inquina, por la prepotencia de la exclusión, estaremos condenándonos a marchar por la vía que lleva a la desintegración como país.

Definitivamente, es imposible que volvamos a ser lo que ya fuimos.

Nos toca enfrentar una nueva etapa que debemos encarar con optimismo. La memoria, que nunca será el futuro, no puede petrificarnos, porque estamos llamados a ser reconstructores de un país con vocación de grandeza, con sólidos cimientos de libertad y con un entramado social unido por lazos de confraternidad capaces de resistir a las más inclementes circunstancias. Aquí todos somos necesarios; aquí todos somos útiles; aquí todos somos Venezuela, aquí todos tenemos responsabilidad de reconstruir.

BRISAS SUAVES
EN LA NECESIDAD de ponerle un parao a la delincuencia, es sumamente grave lo que en las calles de Cumaná se dice con respecto a la actuación de algunos integrantes del cuerpo policial estadal: Según los comentarios callejeros –no tengo elementos justificativos para hacerme eco de ello- existen algunos funcionarios policiales con cuestionables conductas. Se menciona que ciertos funcionarios tienen abultados expedientes – que más asemejan a prontuarios- por tráfico de armas; por agresiones injustas a personas, quedando algunas de ellas en estado vegetativo; por extorsión continuada; por consuetudinarios reposeros con inclinación a emplear el tiempo trabajando en otros sitios como vigilantes y guardaespaldas. De ser así, no hay para dónde mirar, es una práctica perniciosa que, como dijo el dirigente social Jesús Yéguez, debe ser severamente investigada y liquidada. Tal investigación le incumbe al ciudadano Gobernador del estado, profesor Luis Acuña Cedeño, ya que el cuerpo policial está bajo su dirección…

AUNQUE USTED NO lo crea. Este sábado busqué, pregunté, vigilé algunos sitios, fui a la red y no pude descubrir dónde celebraban el bonche del cumpleañero: mi amigo, el licenciado Luis Marcano Barrios. “De lo que te perdiste, por no estar bien informado –me dijo Geroncio Centeno-. Fue una fiesta de pronóstico, Luis botó la casa por la ventana”. Sé que me negrearon, pero lo que me puso medio tristón fue lo de “no estar bien informado”, si la gente me dice que soy el mejor informado de la región oriental. Lo que sucede es que guardan en sitio seguro los secretos, como ese de la fiesta y la de saber cuántos fueron los años cumplidos, de todas maneras, Luis Marcano es mi amigo y pido a todas las potestades universales que le concedan vida en extensión cuádruple a la que ya ha disfrutado…

GRACIAS A LA FORMIDABLE labor de información social que cumple el periódico digital “El Cajigalense”, dirigido muy acertadamente por el teólogo Roberto Romero Pereira, recibo noticias muy al día, como esta: “La Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas informó que en horas de la noche de este viernes, un movimiento telúrico de 3,5 grados se registró al Noroeste de Cumaná. Varios habitantes de la ciudad dijeron haber sentido una sacudida de muy corta duración, que describieron como "un corrientazo", mientras que otros ni siquiera percibieron temblor alguno. No se reportaron ningún daño”. Por eso digo que quienes deseen estar bien, en la zona de Paria, el canal más expedito es el periódico digital “El Cajigalense”…

UNA VARIADA GAMA de organizaciones no gubernamentales colaboraron con el CNE en estas elecciones. En el estado Sucre, el Capítulo Estadal Sucre de la Red de Observadores Electorales Asamblea Educación, bajo la conducción del licenciado Benigno Salazar, llevó a cabo ejemplarizante e imparcial labor de observación para que los sucrenses pudieran ejercer su derecho al voto con absoluta libertad. Creo que la Asamblea Educación merece el reconocimiento público…

LA PROBLEMÁTICA VENEZOLANA que viene andando es una brasa ardiente, que cae en las manos de quien resulte ganador de la Presidencia. El ruego es que tenga suficiente sabiduría para ventearla… USTED VOLVERA a leerme.