Opinión: Oportunistas burlones

Por: Antonio José Rivera Chávez
guaripeterojo@outlook.com

En los tiempos de la llamada IV Republica existió un grupo de “intelectuales” algunos de ellos dados al humor político quienes en forma sistemática dedicaban parte de sus críticas burlonas a la dirigencia sindical de AD la cual dada las condiciones socio-económicas en estos periodos cuaternarios a la buena vida apoyados en el alcance de los Fondos Públicos facilitados desde el Poder para mantenerlos sumisos y obedientes al sistema.

Uno de estos impulsos hacia la clase dirigente de la CTV les permitió codearse con la flor y nata del mundo financiero cuando les crearon el Banco de los Trabajadores y esto les dio cupo en reuniones y saraos de uso exclusivo de los amos del Valle y sus amigos. Por cierto que uno que otro revolucionario criticón también aprovechaban de las amplitudes del sistema para lavar el paladar de malas licores (lava gallo) y hasta se daban el lujo de divertir a la concurrencia a la vez que degustar del caviar y del buen champagne como premio al sudor de sus lenguas viperinas. El caso fue que la pobreza en conocimientos literarios, gerenciales, económicos, etc. servían para hacer de los adecos un motivo de burla ante la insurgencia igualatoria sobre todo de sus trabajadores en concordancia con una buena colaboración al Capitalismo de Estado. Sin embargo a la luz del prisma del economicismo hay que reconocer sus buenos oficios para la consecución de mayores ingresos salariales para la clase trabajadora aun a costa de la enorme corrupción sindical para ese momento. Sin duda como en cualquier actividad en la vida un buen número de sindicalistas pugnaba por el camino de la honestidad y de la defensa clasista de los obreros y empleados del país pero eran minoría.

Hoy día, uno observa como algunos de estos burlistas de oficio con ínfulas de sabios moralistas han escondido su artillería irónica de ayer para ya ubicados en el Poder no solo olvidarse de la contra cultura aplicada y explicada en las mesas de las taguaras respaldados en el fiao necesario para el libar sino que además han sucumbido en halagos hacia una Nueva Clase no solo corrupta, si no armada, inculta y procaz para mantener sus posiciones privilegiadas y hasta algunos puestos en la Asamblea Nacional dándole vigor al militarismo nada comparable por cierto al sindicalismo adeco en cuanto a cultura democrática (pese a la cabilla) oportunismo y lejanía de las artes del lenguaje o de las bellas artes pues todo esto está superado por los momentos. Los otrora enemigos de “clase” del adequismo se han bañado en la misma fuente alimentada por el excremento del Diablo para con creces rebasar cualquier ridículo o extravagancia para hundirse en ese antipático mundo subterráneo de la adulancia desde donde parece ser todas las malas acciones son calificadas con el prisma de la necesidad para el “socialismo imaginario” en avance sin percatarse de la filosofía popular que reza: del dicho al hecho hay mucho trecho”. En la actualidad y en esos predios donde discurren estos intelectuales de la izquierda hay cierto bochinche por un supuesto doctorado a uno de estos émulos de los pata en el suelo del ayer con ínfulas de burgueses victorianos quien de Capitán parece pasar a “DOTOL” para optar por un cargo extraordinario en una sociedad corrupta como seria ser: Contralor General de la Republica para desde allí poner firme y hasta bajar de la mula a tanto burochorocrata en ejercicio con fortunas inauditables. Por ahora la culta chusma irreverente y revolucionaria, calla y otorga. ¡Qué tiempos aquellos¡