Opinión: Revolución y burocratismo

Por: Econ. Antonio José Rivera Chávez
guaripeterojo@outlook.com

La actualidad es un reflejo claro de todo cuanto se estableció desde los años remotos de los años sesenta cuando la lucha armada fue síntesis de ilusiones para justicia social desde cientos de miles de jóvenes incorporados a esta razón de transformación para construir algo nuevo. Sin embargo, a todo tiempo “el caciquismo” y la corrupción se encargaron de establecer una horrible separación entre el pueblo y los políticos del proceso perdido.

Por una parte una guerrilla mal armada, hambrienta y siempre esperando ordenes mientras la burocracia dirigente exhibiendo métodos militaristas se regodeaba en calificativos absurdos como el de “Comandantes” cuando en la realidad no había tropa alguna si no grupos que se reunían muchas veces para la foto y luego dispersarse. En verdad en esta etapa del asunto el pueblo era un convidado de piedra donde se daba por un hecho la aprobación de cualquier acción por sus necesidades primarias (comer, beber y reproducirse). Como quiera que nunca hubo la critica a fondo y con responsables de este fabuloso cuento de cuartel (Guerrillero) las cosas siguieron luego de la derrota de esta escaramuza en un viaje anárquico palpitando sobre las penurias populares esperando el Salvador de la Patria que pusiera las cosas en su lugar para los trabajadores desde donde llegarían al Poder para gobernar.

Así las cosas se produjo combinando la violencia con la lucha cívica del voto un parto de la historia naciendo un nuevo cacique el cual no tenia nada de nuevo pero bien asesorado incursiono en las nuevas técnicas de comunicación llevando adelante la tecnología hacia lo político hasta para el proceso de conteo de votos lo cual permitió entre otras cosas poner en segundo termino el hombre y sus partidos a la hora del conteo en buena jugada anti Partido para construir su propia organización con mayor Poder y centralización que cualquier otra. La burocracia entonces se hizo aun mas poderosa para apoderarse de la Administración Publica y sus actividades dada por otra parte la suerte de un Ingreso Petrolero jamás conocido para favorecer la construcción de un Modelo cuya esencia es el burocratismo donde desde el marco de sus decisiones la burocracia decide todo cuanto dirige la vida nacional sin tomar en cuenta para nada la opinión de los ciudadanos anulando además la existencia de sindicatos. La opinión “clasista” de trabajadores, obreros, campesinos se silencio usando para tal fin la arbitrariedad donde se hizo presente eso del conteo de votos solo por el CNE a la hora de manipular situaciones electorales y por la otra comprando dirigentes sindicales para consolidar este proceso de negación de la discusión para que todo sea aprobado por la burocracia en acción. Ejemplo claro y preciso, el de la Resolución del MILITARISMO (conjugado como parte esencial del burocratismo) donde se puede disparar contra las manifestaciones violando inclusive la Constitución Nacional gracias a la aprobación sin protesto de todos los poderes incluido el Moral desde donde el Defensor del Pueblo canto loas a eso de reprimir el pueblo sin consultar con nadie que no haya sido con el burocratismo que esta conformado como una cooperativa de burócratas.

En este pestañear de la historia ,la democracia popular se hizo Poder Central y de hecho entonces la voz del Pueblo en época de automatización funciona desde el Presidente quien con una red Súper-Poderosa de comunicaciones donde prevalece su voluntad difunde el orden del día elaborado desde el Ejecutivo y ¡Ay¡ del que apenas disienta de un punto o una coma porque se le execra del proceso dictatorial bajo acusaciones terribles de traición a la Patria,derechista,escualido,pelucon,piti-yanqui, etc. para hundirlo entre las rejas del olvido. Así no hay libertad, ni democracia, cuando los trabajadores no poseen Poder alguno ni tan siquiera para patalear cuando la vida práctica con su Inflación los tiene en ascuas.