Por: ANTONIO JOSE RIVERA CHAVEZ
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El excremento del Diablo desde hace tiempo es el abono mas fértil para la perversidad financiera del Estado sobre las mentes populares por una parte y por la otra encima de los Burocráticos Organizados para conformar la dictadura del Burocratismo-Militar donde es la constante de los Siglos el dominio de la fuerza sobre la razón.
El asunto se materializa en monedas. Unas veces devaluadas en mente y alma para el hombre tasado en la subasta publica de la obediencia y el chanchullo. Esta revolución sin gloria pero con pena desde sus orígenes cargo los fusiles y cañones con dólares para derrotar disidencias con lo cual obtuvieron morisquetas infieles en algunos que traicionados, traicionaron huyendo hacia el Norte para exculparse y contarlo todo. Miserias monetarias. Las monedas del socialismo tienen sonido de pobreza más que de riqueza. El burócrata engulle con voracidad el papel de intercambio (dinero) porque el proceso tiene patas cortas y hay que revaluarse con bienes, euros o dólares. Doble moral debatiéndose entre el existencialismo y la alineación “ideológica” (del mercado) de las fantasias.El orden cerrado y cercado por la ignorancia reduce a la sumisión títulos y diplomas para obtener mas monedas.
Este socialismo monetario esta desequilibrado en todas sus partes y hace aguas inundado de necesidades no por los gustos sofisticados de los burochorocratas si no por las penurias de Juan Pendejo y Familia a los cuales no les alcanza en el reparto lo necesario para la existencia cuando además el rió de dólares del Ingreso Petrolero merma para llegar a la mesa de los mas pobres. El Presidente obrero reparte con miedo entre militares y civiles, cuando la balanza por el peso de sables y fusiles se desnivela al máximo. Marx se retuerce en la tumba mientras el capitalista boliburgues alaba a Adam Smith .El capitalismo monetario se impone en honor a Milton Friedman pero no se puede ser brujo sin conocer la hierba y a la luz de la Economía de Mercado cuando se reduce a poco el Consumo Privado Civil por la vía cuartelaría de la irracionalidad el asunto tiene respuestas propias y mas allá de Judas estos dineros se hacen inflacionarios para recordar que la riqueza constante y sonante es la de la producción real ascendente acumulativa. Seguido el camino del absurdo llegara el momento en que el papel monetario no sirva ni como sustituto del papel culero (toilet) y entonces veremos que decide Juan Pendejo nacional al respecto. Amanecerá y nos revaluaremos.
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