martes, 26 de julio de 2016

Opinión: Los cambures negros de Juan Pendejo

Por: Tony Rivera Chávez
profetanoskagamus@yahoo.com

Las Republicas bananeras conocidas por este nombre por su dependencia de la explotación de grandes extensiones agrícolas de este fruto tropical se caracterizaban por su dependencia monoproductora donde los gobiernos que permitían la explotación salvaje del mismo estaban en conchupancia con un País dominante, desarrollado y las Fuerzas Armadas eran garantía para dicha simbiosis entre el nacional y el extranjero.

La población de estos países se les sometía bajo consignas como: Dios, Patria y Libertad donde se resumía la intención anti-comunista como si en verdad se tratara de proteger de algo terrible a la Nación cuando lo peor era la propia existencia de estas formas de gobierno para mantener a sus pobladores como “esclavos” con vidas miserables cuando hablar de libertad era suficiente para mandar a la cárcel al campesino o quizás para quitarle la vida por subversivo o terrorista. Estas prácticas afortunadamente han ido desapareciendo del suelo latinoamericano aun cuando en la lejana África se manifiestan algunos gobiernos en este orden retrogrado con respecto a los Derechos Humanos y la democracia Política.

El caso es que analizando ese pasado “bananero” el Pensionado Heroico también conocido como Juan Pendejo en una analogía con la actualidad nacional se pregunta: ¿Qué tipo de banana es esta? Cuando observa como la Venezuela actual a tomado el camino de este tipo de Republicas aun cuando esta ubicada encima de un mar negro de petróleo lo cual le hace presumir que el barril de petróleo se convirtió en racimos de ideas bananeras para la conducción desde el Poder a su Industria y para la estructuración de una sociedad cuyas características son propias de la dependencia de una frutera (United Fruit) mas que de un mercado competitivo donde la oferta y la demanda conduzcan su conducta económica hacia la diversificación y la producción con libertad. Se usa el producto de exportación (petróleo) para obtener Ingresos suficientes para la satisfacción de la minoría dominante ajena a las necesidades del pueblo a la vez que en esta forma dictatorial de conducirnos se apoya en la Fuerza Armada y se le aplica al opositor la misma medicina que en tiempos de la efervescencia de las Republicas Bananeras usando entre otras cosas las consignas donde destaca la Patria como elemento siempre en peligro “por la maldad de los que sufren” y la envidia hacia” la alegría” de los poderosos. Es la dinámica de este tipo de regimenes donde se tejen todos los instrumentos necesarios para reducir la independencia individual del hombre por la vía del hambre y la dependencia del Estado al cual convierten en factor “milagroso” para solucionar problemas primarios de hambre y trabajo como si se tratara de animales en un corral. La maquinaria entronizada en el Poder así se comporta tratando por lo demás de aplastar al hombre pensante en la vía critica para su mejor domesticación creando “relaciones de destrucción” contra todo lo existente considerado como obstáculo para sus propósitos hegemónicos. Todo cuanto ocurre con el tal Tribunal Superior no es más que parte de este libreto dominante muy en boga en esos tiempos de las bananeras ordenando la vida de las plantaciones.

Entonces las “bananas negras” pintadas con el excremento del Diablo han hecho de los barriles petroleros racimos para conservar ese mundo odioso donde nadie quería vivir y el ciudadano o poblador esta sujeto a la perorata del Presidente como guía nacional de fiel cumplimiento y buena conducta hacia el gobierno y es el “Sabio Eterno” que establece las soluciones a los problemas aun cuando sea el mismo la constante negativa para lograr avanzar hacia el punto positivo del optimo de los factores que resuelven el problema en una dinámica donde si desaparece la miseria se esfuma el Dictador por innecesario y ahí esta el detalle como diría: Cantinflas.

El cambio es necesario para salir de esta republica Bananera Modelo Socialista donde ni bananas hay para completar la madura locura que ahora amenaza en convertir al ciudadano en campesino para recolectar hojas de Plátano para Diciembre desde el baño de la casa. La verdad es que se la echan pero no son más que opresores del pueblo.

¡Solo el revocatorio salva¡ ¡Ora pro nobis¡

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios aparecerán luego de ser revisados