Por: Econ. Antonio José Rivera Chávez
guaripeterojo@outlook.com
El rebuscador de oficio experto en guisologia sabe mejor que nadie la manera de entrarle a una cola para siguiendo su movimiento llegar al Pozo de la Dicha donde se cambian tramites por dólares o por bolívares para una ganancia improductiva en bienes para la sociedad para darle un “resuelto” al ciudadano desesperado enloquecido en mares de fotocopias, fondo negro de títulos, firmas notariadas, citas y gastos imprevistos y nunca vistos. Sorprendente además la penetración de estos personajes en la Administración Publica cuando un ciudadano común piensa en la honestidad a toda prueba para la conclusión de tal o cual documento y resulta todo lo contrario pero eso si a precios exorbitantes. Hay sitios donde se tasan estos tramites a precios millonarios por pagina validada cosa que no impide una buena clientela para el profesional del rebusque. Igual la cola y la escasez de un buen servicio aceleran la corrupción y desestabilizan la tranquilidad espiritual del usuario.
Es infantil no entender que donde se colocan obstáculos se genera esta situación donde los burochorocratas y gestores sacan una buena tajada mientras los ciudadanos claman por una limpieza procesal para evitar estas colas que anuncian el guiso a diestra y siniestra .En las colas por otra parte no hay desperdicios porque se alquilan desde sillas hasta el puesto en las mismas además de las concebidas copias cuando hay que hacerlo a distancia también se convierte en sobreprecio al oficiante y hasta los Timbres Fiscales entran en el guión de la rebuscadera nuestra de cada día. Con este panorama no se puede hablar de “nada nuevo bajo el sol” y mucho menos de “hombre nuevo”cuando la esencia de este “Homus Corruptus” seria el burócrata incompatible con la calificación de servidor publico con apetencias monetarias desmedidas. Lo que hay en todo esto es todo lo contrario mandones, mal educados, corruptos y hasta groseros en el cumplimiento de sus tareas. Sin embargo hay excepciones pero no gracias a la educación socialista si no por la propia formación de unos que otros revolucionarios apegados a la tradición de los principios y experiencias de los hombres de la transformación lo cual no es por cierto producto de cuanto se predica hoy día por estas angustiadas tierras.
Si bien es tarea ardua acabar con la Delincuencia Burocrática Organizada hay que ponerle muchas dificultades para que los ingredientes del guiso nunca estén completos y se frustre la acción de daño contra los Fondos Públicos y las actividades administrativas.
Es hora de bajarse de la nube para servirle al ciudadano y borrar tanta cola-mina para la consecución de cosas intrascendentes evitando además el daño continuo para el Patrimonio Nacional.
guaripeterojo@outlook.com
El rebuscador de oficio experto en guisologia sabe mejor que nadie la manera de entrarle a una cola para siguiendo su movimiento llegar al Pozo de la Dicha donde se cambian tramites por dólares o por bolívares para una ganancia improductiva en bienes para la sociedad para darle un “resuelto” al ciudadano desesperado enloquecido en mares de fotocopias, fondo negro de títulos, firmas notariadas, citas y gastos imprevistos y nunca vistos. Sorprendente además la penetración de estos personajes en la Administración Publica cuando un ciudadano común piensa en la honestidad a toda prueba para la conclusión de tal o cual documento y resulta todo lo contrario pero eso si a precios exorbitantes. Hay sitios donde se tasan estos tramites a precios millonarios por pagina validada cosa que no impide una buena clientela para el profesional del rebusque. Igual la cola y la escasez de un buen servicio aceleran la corrupción y desestabilizan la tranquilidad espiritual del usuario.
Es infantil no entender que donde se colocan obstáculos se genera esta situación donde los burochorocratas y gestores sacan una buena tajada mientras los ciudadanos claman por una limpieza procesal para evitar estas colas que anuncian el guiso a diestra y siniestra .En las colas por otra parte no hay desperdicios porque se alquilan desde sillas hasta el puesto en las mismas además de las concebidas copias cuando hay que hacerlo a distancia también se convierte en sobreprecio al oficiante y hasta los Timbres Fiscales entran en el guión de la rebuscadera nuestra de cada día. Con este panorama no se puede hablar de “nada nuevo bajo el sol” y mucho menos de “hombre nuevo”cuando la esencia de este “Homus Corruptus” seria el burócrata incompatible con la calificación de servidor publico con apetencias monetarias desmedidas. Lo que hay en todo esto es todo lo contrario mandones, mal educados, corruptos y hasta groseros en el cumplimiento de sus tareas. Sin embargo hay excepciones pero no gracias a la educación socialista si no por la propia formación de unos que otros revolucionarios apegados a la tradición de los principios y experiencias de los hombres de la transformación lo cual no es por cierto producto de cuanto se predica hoy día por estas angustiadas tierras.
Si bien es tarea ardua acabar con la Delincuencia Burocrática Organizada hay que ponerle muchas dificultades para que los ingredientes del guiso nunca estén completos y se frustre la acción de daño contra los Fondos Públicos y las actividades administrativas.
Es hora de bajarse de la nube para servirle al ciudadano y borrar tanta cola-mina para la consecución de cosas intrascendentes evitando además el daño continuo para el Patrimonio Nacional.
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